El viaje del héroe, los 12 arquetipos cómo divinidad

Desde La Iliada hasta la Guerra de las Galaxias, casi todas las grandes historias siguen el mismo arco narrativo: El viaje del héroe. Para Carl Jung, el viaje del héroe era un componente del inconsciente colectivo, aparecía de manera recurrente en muchos de los sueños y neurosis de sus pacientes. Joseph Campbell lo encontraba constantemente en los mitos y leyendas de casi todas las sociedades conocidas. La Doctora Carol S. Pearson , estableció que una serie de arquetipos, que se complementan entre sí, dan el origen a el viaje del héroe.

El viaje del héroe, como su nombre indica, es un viaje, una aventura que es nuestra propia vida, y el héroe, por supuesto, somos nosotros y nosotras, destinados a encontrar el tesoro de nuestro verdadero Self (si mismo), en un camino que obviamente se encuentra lleno de obstáculos y miedos, con los cuales debemos lidiar como el héroe y la heroína lo harían contra los villanos y monstruos del camino, para finalmente retornar a nuestro reino, victoriosos y victoriosas.

Esta travesía consta de tres “momentos” (Preparación, Travesía y Retorno), y que están en “sincronía” con las etapas del desarrollo psíquico (Ego, Alma y Self), y constan, cada una de cuatro arquetipos identificados con diferentes cualidades, habilidades y pensamientos, pero que en sí, se complementan y son necesarios para el viaje.

Esta travesía, también está expresada en nuestras vidas, y refleja la búsqueda de un nuevo inicio, la búsqueda de nosotros mismos, como la oruga que esta en preparación para sus metamorfosis y que finalmente saldrá de su capullo como una mariposa, asimismo nosotros comenzamos nuestra travesía como una búsqueda de tesoros y vivencias que enriquecerán nuestra experiencia, y de la cual debemos ser conscientes, ya que nosotros mismos escribimos nuestro propio viaje, y así es como se da nuestro auto reconocimiento y maduración.

La travesía, al igual que un cuento épico, muestra lo que toda persona debe enfrentar, ya que es un conflicto entre opuestos, amores, odios, miedos, deseos, puntos fuertes, debilidades, es obvio que es un proceso complejo pero de gran importancia en el ser humano, constantemente esta ocurriendo en nuestras vidas, no lo vemos como una travesía, pero si nos fijamos bien, somos los héroes y heroínas , y nuestra vida, es el reino.

El viaje del héroe, no busca una auto-ayuda, sino un auto-conocimiento, para darle un valor a lo que somos, el motivo no es parecerse a otro héroe, sino ser nuestro propio héroe, con todo lo que somos y queremos. La travesía del héroe propuesta por Pearson, en mi opinión no es algo que debemos ver como una tarea a realizar, la travesía es solo un reflejo, una expresión de nuestra propia vida, en imágenes simbólicas que han estado con nosotros desde tiempos remotos, haciendo parte de nuestro inconsciente colectivo, sabemos que todos tenemos ese héroe interior, sabemos que en ocasiones debemos enfrentarnos a ciertos monstruos y dragones, y que si lo hacemos nos sentiremos felices y satisfechos con nosotros mismos.

Los arquetipos que propone la Doctora Pearson son 12, existen para ayudarnos en la travesía, y es importante aceptar la ayuda de cada una de estas imágenes, ya que cada una ofrece un don diferente pero igualmente importante en la travesía, como dije anteriormente, esta travesía es constante, pero cada vez que retornamos a nuestro reino, nos damos cuenta que hemos evolucionado, y que estaremos listos para nuestra próxima travesía.

Así como se dan las etapas de la travesía del héroe también se dan las etapas del desarrollo psíquico; ‘primero desarrollamos el Ego, luego nos encontramos con el Alma y finalmente se produce una sensación única y singular del Self o Sí Mismo. El periplo del Ego nos enseña a mantenernos a salvo y tener éxito en el mundo. La travesía del Alma nos ayuda a tornarnos reales y auténticos a medida que nos enfrentamos con los misterios más profundos de la vida; y el viaje del Self o Sí Mismo nos muestra el modo de encontrar y expresar nuestra autenticidad, nuestro potencial y nuestra libertad’(Pearson S. Carol 1989, pág. 44;

LA PREPARACIÓN

El Inocente nos ayuda a desarrollar la persona, la máscara que usamos para establecer nuestro rol social,especialmente desde el nacimiento hasta la adolescencia, el inocente nos invita a desarrollar la confianza en uno mismo y en el mundo. El Huérfano preside en las partes de nuestro psiquismo que reprimimos, negamos o simplemente ocultamos para poder exhibir una persona aceptable para nosotros y para los demás. Nos confiere la autonomía y el sentido de realidad. El Guerrero afirma el Ego, concentrándose en la definición y protección de los límites y la satisfacción de las necesidades, nos trae el coraje y la asertividad. También actúa al servicio del Superego, o Ego ideal, para aplastar o castigar las tendencias que percibe como inmorales, autodestructivas o dañinas para los demás. El Ángel custodio tiene las llaves de las puertas del corazón, para que nuestra bondad esté motivada por genuina compasión por nosotros o los demás. En conjunto los cuatro arquetipos ayudan a generar un envoltorio – que para abreviar llamamos Ego – dentro del que puede fluir el Alma. (Pearson S. Carol 1.989, pág. 49;

LA TRAVESIA: EL DESARROLLO DEL ALMA

El alma nos provee de la sensación de sentido y valor en nuestras vidas, es la esencia de nuestra vida, y la ve como tal, intenta alejar los pensamientos razonables del ego, para intentar adentrarnos mas al mundo de la espiritualidad de si mismos, es vivir todo tal como es, no solo saber que es bueno y malo, sino que se es capaz de experimentar las consecuencias de cada uno, y finalmente hacerse real, y ser responsable, sin necesidad de sentir sentimientos de culpa o remordimiento, si se logra la unión con nuestra alma, finalmente podremos lograr el siguiente paso que permite el nacimiento del nuevo Si mismo (Self). Los arquetipos de la etapa de la Travesía son conocidos como los Arquetipos de Transformación y Cambio, personifican el proceso de búsqueda de nuevas opciones, derribar lo que ya no sirve, nos acercan a los misterios de la vida y la muerte, a comprometerse con la gente, valores y actividades, y la creación de nuevas formas. El Buscador, nos ayuda a mejorar la calidad de nuestra propia existencia, la función del Destructor es crear un nuevo equilibrio, es un llamado a destruir para crear, el amante nos ayuda a rescatar la fuente del placer y del deseo, la pasión por la vida; con el Creador podemos crear una nueva realidad, realizar nuestros propios sueños.

EL RETORNO :El héroe vuelve victorioso y renovado. El regreso es la última etapa del viaje, el descubrimiento del verdadero yo, el logro de la meta, el sentido real de la propia identidad. Finalmente hemos regresado a casa, más ricos y más conscientes que antes.Cuando regresamos del viaje descubrimos a los Soberanos de nuestro reino y sabemos que el reino continuará renovándose cuando el Mago entre en acción a través de la curación y transformación de nosotros mismos. La aceptación de nosotros mismos pasa por el Sabio que nos ayuda a liberarnos de las ilusiones, y con el Loco aprendemos a vivir con alegría el momento presente sin preocuparnos por el mañana.

En conclusión, conservamos un legado de nuestra esencia, invisible, intangible, pero esta aquí, ¿lo sentimos? Claro. Es la vida misma, es ser Humanos, aun nos queda mucho por ver, por saber, por descubrir, ¿estamos listas para ser nuestro propio mito?.

• Los arquetipos de Carol S. Pearson.

Uma Zuasti.